martes, 20 de mayo de 2014

La Campaña: Reflejo de un país sin memoria

Hace ocho años, cuando Alvaro Uribe era presidente de la república y aspiraba  ser reelegido después de la modificación de la Constitución que hoy tiene a sus ministros del Interior y Protección Social esperando que la Corte Suprema de Justicia dicte sentencia en un proceso penal en su contra por los delitos cometidos en el trámite de esa reforma, el exministro de Comercio Exterior y de Hacienda de los gobiernos de Gaviria y Pastrana y exjefe del partido liberal Juan Manuel Santos se encargaba de la creación de un nuevo  movimiento político que denominaron partido de la U en honor al caudillo que había transformado el país , cuyo ideario sería diseñado por el primo de Pablo Escobar, hoy Senador  de la República, siendo el encargado de la estrategia de  campañas el señor JJ Rendòn patrocinador de causas humanitarias como la entrega a la justicia de asesinos y narcotraficantes. En medio de la campaña para la designación del candidato liberal a la presidencia, el senador Rafael Pardo Rueda fue acusado por Santos de realizar una alianza con las farc para impedir la reelección de Uribe. Santos nunca demostró las acusaciones realizadas contra Pardo, a las cuales tiempo después calificó de rumores que èl había divulgado.  Los conservadores y el partido Cambio Radical con Vargas Lleras a la cabeza apoyaron al candidato presidente quien logró su reelección en la primera vuelta presidencial de 2006.
El nuevo uribista pura sangre recibió como premio a su trabajo y dedicación el Ministerio de Defensa Nacional desde donde logró labrar una imagen pública de hombre exitoso, de mano dura y sucesor de la seguridad democrática. Entre sus acciones más importantes estuvieron el ataque al campamento de Raul Reyes en Ecuador y la liberación de Ingrid Betancur. En esta última acción ,se utilizaron en un helicóptero signos de la Cruz Roja, situación que fue desmentida por varios meses por el gobierno hasta que las pruebas no dejaron dudas de la utilización de estos emblemas. Negada la posibilidad de una nueva modificación constitucional que permitiera una segunda reelección, el exministro Santos, único responsable ante la historia de los éxitos de las fuerzas armadas en la lucha contra las farc se convirtió en el candidato que sucedería a Uribe en la presidencia, para lo cual su único tema de campaña hace cuatro años fue mencionar en todos los foros y lugares que sería el continuador del mejor presidente de la historia de Colombia. Santos conto con todo el apoyo del gobierno y logro su objetivo de llegar a la presidencia de la república. Ministro de tres de los cuatro presidentes que lo precedieron, el nuevo mandatario había demostrado a lo largo de su carrera política que tiene un concepto particular de la lealtad: solo se guarda lealtad a si mismo. La ceremonia de posesión del nuevo presidente fue particular. Su antecesor sentado en una silla presenció la posesión gesticulando sus aprobaciones y negaciones sobre el discurso del presidente del Congreso, senador Armando Benedetti. Al parecer, nuestro caudillo quería notificara todos que no había entregado sino prestado el poder a su exministro, mientras una Asamblea Constituyente modificaba la carta política y le permitía regresar a ocupar la presidencia de manera vitalicia. La historia sobre los desencuentros entre el actual presidente y su antecesor se profundizó por el inicio de los diálogos de paz del actual gobierno con las farc. A partir de ese momento, Uribe y sus seguidores identifican a Santos como un impulsor  del castrochavismo que quiere implementar en Colombia los fracasados modelos de gobierno de Cuba y Venezuela. La realidad demuestra todo lo contrario. Santos ha sido un suscriptor serial de tratados de libre comercio que salvo los temas del proceso de paz ha continuado las mismas políticas del gobierno anterior. Los cambios que ha intentado realizar en asuntos diferentes han fracasado estrepitosamente. Las reformas a la educación y la justicia son un ejemplo de ello. La modificación al tema de las regalìas ha permitido que personajes como Chica aumenten su patrimonio de manera astronómica en pocos años.
Las disputas de las últimas semanas previas a la elección del próximo domingo referentes a la interceptación de comunicaciones promovida por un integrante de  campaña de Zuluaga y las gestiones del estratega de la campaña de Santos para promover la entrega de delincuentes han centrado la atención del país. Dos semanas antes que comenzaran las acusaciones mutuas, en un acto público el aspirante a la vicepresidencia Germàn Vargas Lleras fue interrumpido por un asistente a una reunión política. La respuesta del candidato tildándolo de gamìn y expulsándolo de la reunión fue el comienzo. Menos de 24 horas después por las redes sociales Vargas orgulloso demostraba que dicha persona era miembro del partido de Uribe y demostraba su afirmación con fotografías. ¿Cómo obtuvo esa información el candidato? ¿todas las personas que intervienen en sus reuniones son grabadas e investigadas? ¿Quièn realizo esa investigación en tan corto tiempo?. Llevamos una semana  siendo informados diariamente sobre las relaciones del “hacker” con Zuluaga. Queda claro hasta el momento que funcionarios del gobierno continúan realizando interceptaciones ilegales en el territorio nacional.  El problema aquí es que esa información era vendida a terceros como Sepulveda que la utilizaban en la campaña que le pagaba para manejar asuntos de estrategia en redes sociales. Quien aparece en la mitad de todo el asunto es Luis Alfonso Hoyos, funcionario de Uribe durante su gobierno y Director del Sena de la administración Santos hasta 2012. Para terminar de ensombrecer el panorama, el expresidente galerista, padre del jefe del partido liberal y aspirante a Ministro sale a la plaza pública a gritar improperios contra Uribe.  Ese expresidente fue el mismo que hace 23 años traicionando los principios de Galàn, en cuyo nombre había llegado al poder, “pactaba” con Pablo Escobar su entrega a la justicia. Solo falta que el elefante salga a exigir claridad en la financiación de las actuales campañas.
Nada de lo que está pasando debe sorprender a nadie. Somos testigos de la lucha entre dos personas igual de ambiciosas y que no tienen  limites éticos para lograr sus objetivos. Santos escuda su ambición de gloria eterna chantajeándonos con el proceso de paz. La firma de un acuerdo que permita la desmovilización de los miembros de las farc solo puede lograse si él es elegido presidente. Uribe, el padre de los inversionistas inmobiliarios millonarios siempre ha demostrado que es fiel a aquello de que el fin justifica los medios. Todos los que gravitan alrededor de ambos “líderes” son las mismas personas que se han beneficiado del Estado en los últimos veinte años en el país. En realidad no existe disyuntiva entre uno y otro.  La victoria de cualquiera de los dos es el triunfo del mismo grupo de personas que manejan el país desde siempre. Recuerden a Rafael Pardo después de haber sido falsamente acusado por Santos, recibiendo el Ministerio de Trabajo. O Serpa la embajada en la OEA después de la primera victoria de Uribe.  Son caimanes del mismo pozo y por el desconocimiento de nuestro contexto vamos a elegir entre dos opciones que son la misma. Por su cercanía y hermandad, sus acusaciones mutuas tienen un valor adicional: Son todas verdad.

jueves, 1 de mayo de 2014

El peligro de no debatir nada



A menos de un mes para las elecciones presidenciales, la principal tarea de tres de los cinco candidatos ha sido que los ciudadanos los conozcan debido a que sus rostros continúan siendo desconocidos para la mayoría de los electores. Mientras la exsecretaria de Gobierno de Samuel Moreno Rojas cambia de peinado para atraer más votantes, el exministro de Hacienda del gran Colombiano multiplica sus anuncios en televisión impulsando su candidatura en regresar al paraíso en que vivimos del 2002 al 2010, otra exministra de Uribe se arranca una cinta del rostro en lo que parece una propaganda de un depilador para enfatizar en su carácter. Peñalosa, más conocido a nivel nacional ha tratado de revivir la ola verde de hace cuatro años, encontrando en Mockus su principal opositor quien no desaprovecha entrevista para manifestar que el candidato del partido verde no es la persona para guiar a Colombia en este momento. El dos veces exalcalde de Bogotá ha demostrado con sus actuaciones después de las elecciones de 2010 en varias oportunidades su generosidad con quienes lo ayudaron en dicha campaña. Antanas gusta de las alianzas y los partidos únicamente cuando actúa como jefe. Eso de ser gregario no es para personas de su talla. Por último se encuentra el candidato presidente quien ha logrado superar y por mucho al presidente anterior en clientelismo y cinismo. Su última víctima fue el tenista Santiago Giraldo  a quien felicito antes de la final del Abierto de Barcelona y como era de esperarse condenó a una derrota al día siguiente. Pero nada más insoportable  que su comparación permanente con el técnico de la selección Colombia de fútbol. En cuanta entrevista que concede siempre compara su gestión con la de Pekerman, indicando que a nadie se le ocurriría cambiar al técnico antes del mundial. Cuando se pensaba que no habría situación que pudiera superar la anterior, el deceso de Gabriel García Márquez permitió a todos los colombianos conocer durante tres días consecutivos como el escritor era un íntimo amigo del presidente a quien le pidió que culminara el proceso de paz. La ceremonia realizada en Bogotá en honor al escritor se convirtió en un acto de campaña del presidente ubicado en la mitad de la Iglesia con Cristo a su espalda y todo el país escuchándolo. Por no mencionar la masiva campaña de cuñas de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz que en horario triple a nos recuerda diariamente que si Colombia clasificó al mundial eso es signo de que se conseguirá también la paz.
Mientras la campaña más deslucida de la historia reciente transcurre sin que nadie se entere que estamos a puertas de una elección presidencial, ninguna propuesta motiva ni ningún tema se debate. La negativa de Santos y Peñalosa a asistir a debates ha terminado por liquidar los mismos. Los dos  canales privados, agradecidos con un presidente que no ha permitido les llegue la competencia en cuatro años registran la campaña en noticias de menos de dos minutos de duración. Santos se ha dado el lujo de no rendir cuentas de nada. No se habla de su fracaso en la reforma a la educación, la cual fue retirada hace dos años y nunca se volvió a presentar, permaneciendo la misma Ministra quien hoy anuncia con una gran sonrisa que llenaran de tabletas todos los colegios del país. La escandalosa reforma a la justicia acordada entre el Gobierno y las Cortes que fue desechada en último momento tampoco se volvió a presentar. Y qué decir del actual Ministro de Agricultura, él mismo que realizó una rueda de prensa para divulgar una interceptación ilegal al único Senador de la oposición.  Y cuando alguien pide una explicación en público a la campaña reeleccionista sobre algún tema, su candidato a Vicepresidente además de insultar al atrevido resuelve sacarlo del recinto donde se encuentra.

Sin ideas, sin propuestas ni debates Colombia deberá elegir  a finales de mayo el próximo presidente. El candidato a la reelección pretende que el país elija entre la paz y la guerra. Así como se adueñó de García Márquez, el presidente se promociona como el único colombiano que puede finiquitar un proceso de negociación con las farc. Y lo increíble es que las farc, repudiadas y desprestigiadas han sido determinantes en las últimas cuatro elecciones presidenciales.  Son las farc hoy el mayor problema del país? Mientras seguimos discutiendo sobre lo divino y lo humano con los insurgentes, en los siguientes meses  saldrán a las calles todas las personas que se desmovilizaron en los procesos de las autodefensas. Delincuentes que secuestraron, desplazaron, robaron, asesinaron y descuartizaron saldrán a la calle al cumplirse el término de la pena alternativa de 8 años pactada en los procesos con estas organizaciones criminales. ¿Esta el Gobierno preparado para la reinserción en la sociedad de estos delincuentes? ¿El Inpec con su reconocida eficiencia será el encargado de supervisar los reinsertados? ¿Existe alguna propuesta del abogado de Saludcoop que ejerce temporalmente como Fiscal sobre este particular?  Creo que todos conocemos la respuesta. El asunto es que el riesgo de no tener una política pública sobre un asunto tan delicado puede dar como resultado que situaciones como la de Buenaventura se multipliquen en otras partes del país. Pero nuestro Pekerman está ocupado en organizar la comitiva que acompañara la selección a Brasil.

lunes, 21 de abril de 2014

Marìa Fernanda Cabal y la libertad de expresiòn.

Mientras los cientos de “amigos íntimos” de Gabriel García Márquez entregan declaraciones a medios nacionales e internacionales en las cuales relatan los momentos compartidos con el escritor y nuestro representante en México, el diplomático de carrera “Yo, José Gabriel” se muestra golpeado por la noticia de la muerte de “nuestro” premio nobel, en Colombia las declaraciones de la valluna María Fernanda Cabal, elegida a la Cámara de Representantes por Bogotá de las listas cerradas del partido de propiedad del expresidente Alvaro Uribe han iniciado una discusión que en las últimas horas ha terminado (“como no podía ser de otra manera en la cuna del realismo mágico” ) en una denuncia penal contra la  señora Cabal por discriminación y hostigamiento.
Para quienes no lo sepan, la señora  Cabal es la esposa del presidente de Fedegan y su inclusión en la lista de candidatos  a la Cámara de Representantes por el Centro Democrático no obedeció a ningún criterio diferente  a la voluntad del “Gran Colombiano”. Luego de escuchar hablar a la parlamentaria elegida sobre cualquier tema diferente al que causo la actual polémica queda  la impresión de encontrarse ante un personaje que es la mezcla de Godofredo Cínico Caspa y Carlos Moreno de Caro. Las opiniones de una persona con ese avanzado nivel de tolerancia no deben sorprender  a nadie. Ahora, la respuesta a los comentarios de Cabal por parte  de abogados de oficio del talante de Armandito Bendetti  y otros congresistas que piden castigos por las expresiones utilizadas son lamentables.
Y fue muy grave lo que dijo la futura parlamentaria? Cabal manifestó que García Márquez compartiría el infierno con Fidel Castro. Esa acusación para alguien creyente del tipo de Alejandro Ordoñez puede ser lesiva pero si la persona a quien va dirigida no tiene creencias de ese tipo, es una expresión que no genera la más mínima ofensa. Y aún así lo fuera, uno de los derechos ciudadanos es la libertad de expresión y precisamente la manera en que se observa si este derecho es respetado es cuando alguien dice algo que no gusta a la mayoría. Pretender que todos los ciudadanos tengan idéntica apreciación sobre personajes y hechos no es propio de la democracia.
Mientras se busca el linchamiento mediático de la señora Cabal, nuestros medios de comunicación nos mostraban muy orgullosos la visita que a la casa de la familia García Márquez en México realizaba el expresidente mexicano Carlos Salinas de Gortari, “gran amigo del nobel”. Ese íntimo amigo que fue presidente entre 1988 y 1994  es un paradigma de la corrupción a nivel latinoamericano.  Salinas representa al político corrupto que desafía al sistema al ser señalado por todos pero no tener condena alguna. Como simple lector y admirador de García Márquez esa visita me indigna más que los comentarios imprudentes de la señora Cabal.

jueves, 27 de marzo de 2014

Venezuela: Entre la indiferencia y la complicidad internacional.

Hace cuarenta y cinco días estallaron en diferentes partes de Venezuela protestas ciudadanas que buscan una respuesta del gobierno de Nicolás Maduro  al desabastecimiento de productos básicos, la inflación y la violencia. Las primeras semanas de estos acontecimientos fueron cubiertas por los medios internacionales, algunos de los cuales fueron censurados y expulsados de la república bolivariana por transmitir una versión diferente a la gubernamental. La respuesta del gobierno ante las variadas muestras de inconformidad ha sido cerrar filas en defensa de la revolución bolivariana acusando a los líderes opositores de fascistas y representantes de intereses foráneos que tienen como única finalidad desestabilizar el joven gobierno del heredero político de Chávez. Por la magnitud del movimiento ciudadano que expresa inconformidad por la actual situación del país, el gobierno comprendió que debía apuntar a una batalla de desgaste, en la cual el pasar de los días corre a su favor y la demostración de una aparente estabilidad terminara  haciendo ceder por cansancio a los opositores.  En desarrollo de esa tarea ha logrado triunfos diplomáticos como volver invisible la situación ante instancias como la OEA o Unasur, además  de disminuir  el interés de los medios de comunicación internacionales  en la situación que fue noticia de cubrimiento especial hace un mes pero hoy se  ha convertido en un reporte diario  monótono y repetido en el cual se informan de marchas y escaramuzas matutinas, como si dichas situaciones correspondiera a la normalidad en la vida del país. Lo anormal se volvió normal y los reportes hacen referencia de las diferentes concentraciones en contra del gobierno con la misma naturalidad que informan sobre el clima o los resultados del fútbol. Desafortunadamente para los ciudadanos venezolanos que esperan y aspiran  vivir en una nación donde tengan acogida ideas diferentes a las chavistas ha llegado el momento de notificarles que se encuentran solos en su lucha y ninguno de los gobiernos democráticos del continente está dispuesto a arriesgar nada para no digamos apoyar sino siquiera visibilizar la situación que vive su país. Panamá es el mejor ejemplo del tratamiento que el gobierno revolucionario le dará a cualquier Estado que ponga sobre el tapete el tema de la situación venezolana. Así le responde Latinoamérica a la tierra de donde salieron los hombres y mujeres que lucharon por la independencia de España hace dos siglos.
Causa desconcierto el estado de un país que durante los últimos tres lustros ha recibido los mayores recursos de su historia por el valor del barril de petróleo superior en un 1.000% al momento de la llegada de Chávez al poder. El argumento según el cual las marchas son auspiciadas por la oligarquía huérfana de poder que quiere retomar el mando del país se caen por su propio peso. Los venezolanos más adinerados que no se alinearon con el gobierno salieron hace mucho tiempo del país y establecieron sus negocios en otras naciones. El capital humano mejor calificado también emigró o está en proceso de salida del país. Las marchas de hoy están conformadas por personas de clase media que se resisten a creer que la única posibilidad de tener trabajo e ingresos en su país estén directamente relacionadas con pertenecer al PSUV, vestirse de rojo, aplaudir al déspota de turno y hacer juramentos ante la bandera del “padre eterno de la revolución”. Causa escalofrío a un ciudadano de un país democrático que su país tenga como referencia la Cuba de los hermanos Castro que llevan más de medio siglo en el poder logrando convertir lo anormal en normal. Para algunos venezolanos la derrota de este movimiento puede ser el motivo para confirmar la pérdida de su país. Para quienes no puedan emigrar será la continuación de un régimen que desde la lista Tascón ha demostrado que no se olvida de sus opositores. Todo lo anterior ocurre ante el silencio cómplice de los gobiernos del continente, los mismos que se encargan de señalar continuamente los males de las desastrosas dictaduras de la segunda parte del siglo XX en América Latina  pero no tienen ningún reparo en sentarse a manteles con dictadores como los Castro ni tampoco en voltear la vista hacia otro lado para no ver las violaciones a los derechos humanos en Venezuela. Si él déspota tiene ideas de derecha es un dictador pero si tiene ideas de izquierda es un revolucionario.
Quienes aspiran a vivir en un país diferente al modelado por Chávez, Maduro y compañía no cuentan con ninguna instancia internacional donde siquiera puedan denunciar los excesos del régimen. El sistema interamericano de derechos humanos está demostrado su inutilidad y es irrespetado por los jefes de Estado que no comparten sus decisiones. Colombia que hasta hace una semana cumplía las decisiones de la Comisión y la Corte Interamericana de Derechos Humanos ya se unió al club de países que acata estas decisiones de acuerdo a la conveniencia de los mandatarios de turno. La manera grotesca como Santos tomo por asalto la Alcaldía de Bogotá nombrando como  mandatario a su Ministro de Trabajo y dedicado a resolver los problemas de la ciudad en pocos días con la finalidad de obtener réditos para su campaña electoral es repugnante. Nada diferente puede esperarse del mismo personaje que hace dos años  alabó la reforma a la justicia por la noche y en la mañana salió a hundirla con el pretexto de haber sido engañado. Para lograr su reelección no ha tenido problema en subirse en hombros de reconocidos corruptos, de los cuales se hace fotografiar en público. Ante la inminente reelección del actual presidente, nuestros vecinos pueden tener la seguridad que Colombia jamás realizara ninguna acción que pueda dañar su relación con el anfitrión de los jefes de las farc. El oportunismo y la  posibilidad de sacar ventaja de la actual debilidad del gobierno venezolano serán las motivaciones para actuar de la mayoría de los gobiernos del continente. Los venezolanos están volviéndose protagonistas del cuento  “El Traje del Emperador” de Andersen, pues aunque su país está cada vez en una situación más ruinosa en todos sus frentes, nadie en la comunidad internacional se atreve a señalar esto para no ofender al emperador. Que tristeza estas revoluciones que hacen a los ciudadanos suspirar por el antiguo régimen. Cuando todo termine, lo único que sabrán hacer los hijos de la república bolivariana  será aplaudir porque si algo ha enseñado la historia de estos regímenes autoritarios es que liquidan la capacidad de raciocinio de los individuos y dejan reducida la función intelectual a una sola cosa: aplaudir

lunes, 10 de marzo de 2014

El triunfo de las famiempresas electorales


Ayer nuevamente se confirmó que la política en Colombia que debía ser una actividad en la cual  hombres y mujeres prestan sus mejores oficios al servicio de los demás se ha convertido en un conjunto de microempresas familiares que realizan inversiones cada cuatro años con la finalidad de obtener utilidades para sus inversionistas y entregar grandes bonos a sus representantes de acuerdo al cumplimiento de metas relacionadas con adjudicaciones de contratos estatales o direccionamiento de decisiones de política pública. No de otra manera puede explicarse la rapidez en que son remplazados personajes condenados por la justicia por delitos que van desde homicidios y peculados hasta conciertos para delinquir por hermanos, hijos, sobrinos y esposas que ocupan los cargos de elección popular que estos han dejado. La historia enseña las consecuencias de dejar el “negocio” en manos de otro. Ahí está Uribe quejándose de que Santos utilice las mismas estrategias que él utilizó cuando era presidente. Cuando en las elecciones de hace 12, 8 y 4 años ocurrió lo mismo, esto era consecuencia de la voluntad popular. Ahora, cuando estos votos no se contabilizan a favor del expresidente son el resultado de la compra de votos. Solo falta que el elefante salga a realizar declaraciones sobre la turbia financiación de algunas campañas al congreso y la presidencia.

La lista que más votos recibió fue la del partido de la u. Este partido que fue creado en torno a los “programas” de Uribe y por ello fue bautizado así y dirigido en sus inicios por el actual presidente quien salía en todas las propagandas diciendo “Presidente, este es su partido, el partido de la U.” ha tenido una importante renovación. Su mayor elector fue Musa Besaile Fayad, quien ha sido autor de  leyes tan importantes como la declaratoria de patrimonio cultural de las fiestas taurinas de Sahagun y la declaratoria de patrimonio histórico, educativo y cultural de la Institución Educativa Andrés Rodríguez Balseiro de Sahagún. Su obsesión en el tema patrimonial fue correspondida generosamente por los electores. El segundo candidato con mayor votación fue Bernardo Miguel Elías Vidal quien presentó el año anterior un proyecto de ley para declarar patrimonio histórico, folclórico y cultural de la Nación el Festival del Porro en San Pelayo, Córdoba. Esta loable iniciativa garantizó el interés de los votantes quienes tuvieron mucho que discutir entre las iniciativas de estos congresistas que tienen la cultura y la educación como el propósito principal de su quehacer político. Para terminar con la U, el tercer escaño fue para José David Name, heredero del patriarca Name Terán, de quien no recuerdo sus hazañas con la finalidad de no aburrir a quienes leen estas líneas. En el Partido Conservador los tres primeros lugares fueron para los expastranistas, exuribistas y ahora santistas Gerlein, Cepeda y García Burgos. En Cambio Radical, Arturo hijo de Fuad ocupó el primer lugar seguido por Carlos Fernando Galán y Varon Cotrino, a quien alguna vez Uribe llamó “manzanillo de cuello perfumado”. En el Partido Liberal Serpa papá obtuvo la mayor votación seguido del hermano del presidente del Congreso y Juan Manuel Galán. Uribe, por su parte arrastró con su nombre al Congreso a 18 personas que solo tendrán que rendirle cuenta a él pues nadie voto por ellos. Como no todas las noticias podían ser negativas, personas como Jorge Enrique Robledo y Claudia López garantizaran que se discutan en el Congreso asuntos diferentes a las declaratorias de patrimonios históricos y culturales. Ayer ganaron una vez más los empresarios de la política y debido al ingreso al Congreso del Centro Democrático la tarifa que tendrá que pagar Santos para mantener su gobernabilidad y Vargas Lleras para asegurar sus lealtades con miras al  2018 será bastante alta. Pero, qué importa, igual, ellos giran con chequera ajena.

P.D. Un Chávez no nace de la noche a la mañana. Se necesitan años o décadas de abusos de los mismos a los mismos para que un líder locuaz y carismático conquiste a todos los que quieren un cambio. Es un error ignorar lo que pasa en la casa del vecino cuando en la propia ocurren  las mismas situaciones.

lunes, 10 de febrero de 2014

El día que le exigieron a Pedro Gómez cumplir la ley

El paisaje de la sabana de Bogotá comenzó a cambiar de manera drástica hace dos décadas. El afamado constructor de Unicentro adquirió varias hectáreas al lado de la vía que conduce a Sopo y con la autorización de la Alcaldía de Chía procedió a asfaltar la montaña, dividir el predio en cientos de lotes y vender viviendas exclusivas a altos precios. Siguiendo su audaz ejemplo, otros constructores se dedicaron a edificar en los campos de la Sabana, lo que trajo como resultado el paisaje que puede observarse hoy. Montañas cruzadas por carreteras con destino a conjuntos residenciales de acceso limitado. Por la época de esas hazañas no existían los molestos planes de ordenamiento territorial situación que permitía a los mandatarios locales un amplio margen de discrecionalidad para expedir licencias de construcción en zonas que estaban destinadas a la conservación. Aprovechando  vacíos legales se llenaron los cerros orientales de Bogotá de construcciones y barrios privados sin importar las declaratorias de reservas naturales. Solo hasta el año pasado el Consejo de Estado dictó sentencia en una acción popular que confirma que deben respetarse los cerros y prohibirse los desarrollos urbanísticos en esa zona. El asunto es que dicho Tribunal se demoró siete años en “debatir” el asunto y cuando por fin resolvió una acción popular sobre el tema los cerros están inundados de invasiones ilegales y otras muy legales con licencia de construcción firmada por Curador Urbano. En su insaciable búsqueda de terrenos para edificaciones el personaje portafolio del año 2013 por su vida y obra quiso convertir el Seminario Mayor de Bogotá en un conjunto de hoteles y edificios, idea que no pudo concretar debido al escándalo mediático causado por las utilidades que tendría el episcopado por dar en aporte un terreno que en su momento un fiel habría donado con la única destinación de ser un lugar  para la formación de sacerdotes.
En la ciudad de Villavicencio se realizó a mediados de la década pasada la construcción del Centro Comercial Unicentro. La firma dueña de la marca y desarrolladora del proyecto se asoció con el señor Marco Antonio Gil propietario del predio donde se realizó dicha obra. La relación comercial con el señor Gil se terminó en el año 2007 cuando este último ingresó a la lista Clinton. Hace un año Gil, quien tiene el alías de “el papero”, fue detenido y recientemente fue condenado por los delitos de narcotráfico, lavado de activos y enriquecimiento ilícito a la severa pena de seis años de prisión. Salvo que tenga una lesión como la de Falcao, el papero estará en libertad para asistir al mundial de Rusia en 2018.  Por su parte, su exsocio en el exitoso proyecto de Unicentro Villavicencio manifestó que no tenía idea de las actividades de Gil y por tanto su actuación de buena fe no podía ser puesta en duda por nadie. Este contundente argumento bastó para que la Fiscalía archivara cualquier investigación con relación a la sociedad del papero y el constructor. Pensar que si el constructor se hubiera llamado Pedro Pérez habría tenido que explicar hasta el último de sus días los detalles de sus negocios con el papero. Pero cuando estamos ante personajes de vida y obra tan ejemplar su sola palabra sirve para mitigar cualquier duda sobre su proceder. Medio siglo después el país que describía Salom Becerra en sus libros sigue siendo el mismo.
Durante el segundo semestre del año 2013 se conoció la decisión de la Alcaldía de Chía de no otorgar licencias construcción para el desarrollo de más etapas del Conjunto Encenillos de Sindamanoy en la ciudad de Chía. La constructora que desarrolla el proyecto logró que el Ministerio del Medio Ambiente desafectara del área de reserva natural 72  hectáreas para la construcción de más viviendas campestres que se convertirían en etapas adicionales del proyecto inicial. Era la primera vez que se daba una negativa por parte de la administración de Chía a la empresa del extesorero del partido liberal. La Alcaldía hasta la fecha ha mantenido su decisión, la que tendrá que defender ante los estrados judiciales por las seguras demandas que recibirá por la misma. No obstante lo anterior, la misma firma ha desarrollado el mismo modelo de negocio consistente en urbanizar áreas rurales y asfaltar montañas para construir conjuntos cerrados exclusivos  en los vecinos municipios de La Calera y Sopó. Una vuelta por La Sabana permite observar el estado de sus negocios y la ausencia total de acción de las autoridades ambientales en la protección de los recursos naturales.

Aunado a lo anterior, hace pocos días se conoció la decisión de la Corte Constitucional que ordena la suspensión de la construcción de varias torres de apartamentos en la ciudad de Bogotá en las instalaciones donde funcionaba el Colegio Colsubsidio en un exclusivo sector de la capital colombiana. El meollo del asunto es que el uso del suelo de dicho inmueble era dotacional pero debido a una solicitud realizada por la Caja de Compensación Familiar propietaria del inmueble a la Secretaria de Planeación en el sentido de modificar el uso del suelo, los funcionarios del gobierno de Luchito Garzón en los días previos a finalizar su gestión en diciembre de 2007 resolvieron favorablemente la misma y mediante un acto administrativo autorizaron el uso residencial en dicho inmueble. (Por esos mismos días, en esa misma alcaldía, en otra dependencia se entregaba el contrato de la calle 26 a los hermanos Nule) El único inconveniente que existía es que el cambio de uso de suelo solo puede ser realizado por el Concejo de la ciudad. Sin embargo, con este documento se tramitó  la licencia de construcción, se comercializó el proyecto y comenzó la construcción de los edificios en dicho inmueble. Los vecinos interpusieron los recursos legales contra la licencia de construcción, los cuales no prosperaron. Fue por vía de la acción de tutela que el máximo tribunal constitucional considero afectados sus derechos fundamentales y ordenó la suspensión de la obra. Al saber la noticia, el propietario de la constructora quien fue juez de la república indicó que dicha decisión crea inseguridad jurídica y mediante sus abogados ha solicitado ante la Sala Plena de la Corporación la nulidad de la decisión de la Sala de Decisión que adoptó la determinación que se ha comentado. El tono de las intervenciones del dueño de la constructora afectada en entrevistas como la realizada a Blu Radio han demostrado la soberbia de quien ha realizado su querer en Bogotá y sus alrededores sin que autoridad alguna hubiera tenido jamás la valentía de realizar observaciones sobre  sus proyectos. No se ha dicho la última palabra pero genera algo de satisfacción saber que algunas veces en Colombia las leyes también son para los intocables.

viernes, 24 de enero de 2014

¿Y donde están los derechos de los afectados por las decisiones de Petro?


Pasaron más de diez años y cuatro alcaldes para que en  Bogotá se expidiera la norma que regulara el desarrollo del  Norte de la ciudad, desde la calle 170 hasta los límites con el municipio de Chía. Mediante el Decreto 043 de 2010, el Alcalde de Bogotá expidió la norma que dio vida al Plan de Ordenamiento Zonal del Norte. En desarrollo de dicha norma y mediante un acuerdo de valorización, se comenzaron a recaudar los recursos que permitirían la financiación  de la ampliación de las Avenida Boyacá y Carrera Novena  entre Calle 170 y Calle 200 que permitirían aliviar en algo las congestiones de tráfico que se presentan en la Autopista Norte. La misma norma  establecía los usos de los terrenos de los suelos ubicados en áreas de expansión urbana   en esa zona y la forma de desarrollo a través de planes parciales. Cuando comenzaban a ser recaudados los recursos y se iniciaba el trámite para los procesos de licitación de la construcción de estas vías se dio el cambió de gobierno en Bogotá. A los pocos meses de su posesión el Alcalde Petro sin estudio técnico alguno y soportado en su voluntad resolvió que las vías del Plan Zonal del Norte no se construirían y tampoco se daría prioridad en su administración al desarrollo del norte de Bogotá. Cuando se preguntaba sobre los derechos de los ciudadanos que realizaron transacciones comerciales con base a normas expedidas por el Distrito y quienes confiaban en la construcción de las obras públicas por las cuales habían pagado la contribución de valorización la respuesta era: Quien gana las elecciones, gobierna y decide. Y Petro ganó las elecciones y decidió que no hace las obras. Cosas de la democracia. Situación similar ocurrió con la Avenida Longitudinal del Occidente (ALO) y el Plan de Ordenamiento Territorial (POT), en los cuales se impusieron las ideas del Alcalde sin tener en cuenta estudios técnicos ni normas legales. Incluso el POT fue expedido por Decreto a pesar de haber sido rechazado por el Concejo en una interpretación de la ley leguleya adoptada por quien se autodenomina un defensor de la democracia. ¿Dónde estaban los derechos de los ciudadanos en esas decisiones? Estas manera de administrar era propia de un demócrata o más cercana a las autocracias regionales donde la voluntad de los soberanos tropicales se impone incluso contra la ley.

Por lo anterior, causa desconcierto ver al emperador de ayer con la Convención Americana en la mano denunciando el atropello de sus derechos. ¿Acaso hablamos de la misma persona que durante dos años adoptó decisiones solo consultando su voluntad? Sí, es la misma persona pero ahora su rol es el de víctima. Se declara víctima de una conspiración  de toda la derecha y el establecimiento colombiano que quieren impedir la finalización de su obra de “gobierno” en Bogotá.  Y en sus discursos se escuchan verdades pero se mezclan tanto los temas, los nombres y los fines que no termina uno por entender si quien habla es un indignado o un gobernante. Pero no, quien habla asumió un cargo complejo para el que no estaba preparado ni tenía equipo de gobierno. El cambio constante de funcionarios no permite que nadie conozca quien es el encargado de los temas en Bogotá. Por ello, un funcionario desorientado como el Alcalde de Bogotá ha recibido no un castigo sino un premio. En un proceso bastante discutible, el Procurador le está haciendo el favor de retíralo de un cargo en el que no sabe qué hacer. Y nadie se acuerda ya de los dos años perdidos en la ciudad sino que todos nos volvimos expertos en derechos humanos y derecho disciplinario. Paradojicamente, Ordoñez le está salvando la carrera política a Petro quien de terminar su obra de demolición de Bogotá en otros dos años habría quedado inhabilitado para acceder a cualquier cargo público por votación. Iba camino de convertirse en otro Lucho Garzón. Pero el vanidoso procurador lo salvó y ahora tenemos un mártir de la democracia para rato.